El virus que causa el COVID-19 se propaga principalmente a través del aire durante el contacto cercano con personas infectadas. Es más fácil que se propague entre personas cuando están en espacios cerrados que al aire libre. A veces, el virus también se puede acumular en el aire en un lugar cerrado e infectar a otras personas, aunque se encuentren lejos.
Al aire libre, aún un viento suave puede reducir y dispersar las partículas virales, pero cuando estamos en el interior de un lugar, debemos prestar atención especial a la cantidad de aire fresco que entra en el lugar. La circulación de aire fresco es fundamental para atenuar cualquier coronavirus que pudiera estar presente y evitar que se propague entre las personas.
La circulación del aire es importante especialmente cuando las personas están largos períodos de tiempo en interiores y cuando se quitan las mascarillas (por ejemplo, para comer). Eso incluye los lugares de trabajo, tiendas y restaurantes, así como en entornos como refugios o instalaciones de cuidado a largo plazo, y escuelas y edificios de cuidado infantil.
El departamento de Salud Pública — Seattle y el Condado de King recomiendan que los propietarios de negocios y los operadores de edificios implementen estrategias para mejorar la calidad del aire en espacios cerrados. Además de usar mascarillas/cubrebocas, mantener la distancia física y limitar el número de personas que estén juntas dentro de un lugar cerrado, esta es una forma importante de disminuir el riesgo de que las personas contraigan el COVID-19.
El departamento de Salud Pública ha publicado un nuevo folleto de orientación para administradores de instalaciones, junto con recursos adicionales. En la guía se destacan tres enfoques importantes:
1. Aprovechar al máximo el aire exterior en lugares cerrados
Aumentar el flujo de aire exterior es una forma de dispersar el aire en el interior y las partículas de virus. Esto se puede lograr de varias formas. La más económica es abriendo las ventanas y puertas para aumentar el flujo de aire exterior en el edificio. No haga esto cuando el aire de afuera esté contaminado (ya sea durante incendios forestales o si el edificio está junto a una autopista muy transitada) o si existe la posibilidad de que los niños pequeños o las mascotas se caigan.
Si coloca un ventilador en una ventana, colóquelo de manera que expulse el aire hacia afuera, de modo que el aire no sople en la cara de nadie.
El aire exterior también se puede introducir ajustando el sistema de Calefacción, Ventilación y Enfriamiento (HVAC) del edificio. Aumente la cantidad de aire exterior que es introducido al 100%. Si no sabe bien cómo hacer esto, pregúntele a la persona encargada del mantenimiento de su edificio o consulte a un especialista en HVAC.
2. Limpiar el aire interior
También hay formas de eliminar los contaminantes del aire en el interior filtrándolo:
- Instale filtros de alta eficiencia (con clasificación MERV 13 o superior) en su sistema HVAC. No se puede usar filtros MERV 13 en todos los sistemas, por lo tanto, consulte primero con un especialista en HVAC. Si su sistema HVAC no puede usar esos filtros, use la clasificación MERV más alta que pueda.
- Utilice filtros portátiles HEPA (filtros de aire de alta eficiencia para partículas) en todo el lugar. Seleccione filtros que puedan proporcionar un 99% o más de eficiencia de filtración hasta 0.3 micrómetros. Dependiendo del tamaño de su lugar, es posible que necesite más de un filtro de aire HEPA. Consulte la Guía de ventilación de aire para interiores de Salud Pública para determinar cuántos necesitará.
- Una opción de bajo costo es usar un ventilador de caja con un filtro MERV 13 pegado en la parte trasera. La Agencia de Aire Limpio del Puget Sound le puede enseñar a hacerlo. (El Departamento de Ecología de Washington tiene un video en español con instrucciones en cómo hacerlo). Otra idea económica es usar cuatro filtros MERV 13 para crear un cubo, que puede aumentar la filtración y evitar que el aire sople en dirección de cualquier persona en la habitación.
3. Inactivar al virus en el aire mediante el sistema de Irradiación germicida ultravioleta superior (UVGI)
Esta tecnología es muy especializada y puede ser peligrosa si se instala o usa incorrectamente. Trabaje siempre con un especialista de UVGI para consultar e instalar esta tecnología en su espacio. UVGI superior es la única tecnología UV recomendada por los CDC. Utiliza luces ultravioletas instaladas cerca del techo para matar los gérmenes en el aire. La UVGI no es apropiada para hogares, pero puede funcionar bien en algunas instalaciones.
Los sistemas UVGI inactivan los virus en el aire, pero no eliminan los contaminantes. El UVGI puede ser una adición útil a la ventilación y la filtración de aire en ciertas situaciones.
Implementar estas estrategias en sus instalaciones
Todas estas estrategias pueden contribuir a mejorar el aire en el interior de sus instalaciones y reducir el riesgo de propagación del COVID-19. Antes de implementar cualquiera de estos, consulte con el administrador de su edificio o el especialista en HVAC para hablar sobre cuál funcionaría mejor en su situación.
Las estrategias para el aire en interiores funcionarán mejor cuando sean combinadas con el uso de mascarillas, evitando amontonamiento de personas, manteniendo la distancia física y lavándose las manos.
Para obtener más información:
Encuentre más recursos para ayudar a los propietarios de negocios y operadores de edificios a mejorar la calidad del aire en el interior de sus instalaciones, en la página web de Aire en interiores del departamento de Salud Pública – www.kingcounty.gov/covid/air.
- Esta página incluye la Guía de ventilación de aire para interiores del departamento de Salud Pública que trata estas estrategias en detalle.
- También hay consideraciones para sectores específicos, incluyendo los entornos donde se congrega mucha gente, las escuelas y lugares de cuidado infantil y los restaurantes.
- Una hoja informativa complementaria ofrece la misma información con menos detalles.
Publicado originalmente el 30 de abril de 2021.